Coaching Sistémico

Coaching Sistémico

La principal diferencia entre el coaching sistémico y todos los demás tipos de coaching es que se toma en consideración todo el sistema del coachee, al que pertenece la pregunta o el problema.


El proceso de coaching también requiere que el coach actúe desde una posición y actitud sistémica.


El coaching sistémico ofrece al coachee experimentar una perspectiva diferente con respecto a cualquier pregunta, el lugar que ocupa en el sistema (relaciones, roles, responsabilidades) y/o situación.


De esta manera, es posible reconocer patrones personales y su funcionalidad, y cómo están, por ejemplo, entrelazados en sistemas organizativos. También puede revelar que parte del comportamiento del coachee expresa lealtad hacia alguien o algo en la familia de origen. Así, al observar sin juicio, los patrones ocultos se hacen evidentes y comienza el movimiento de transformación.


Por lo general, una sesión suele ser suficiente, aunque en ocasiones, pueden ser necesarias más sesiones.